En este caminar, con otros, se aprende y se desaprenden, cosas, tendencias, vivencias, en fin saberes. Comparto con ustedes este caminar, con algunos artículos, ensayos, notas, comentarios, y extractos de algunos libros, espero sus comentarios, que nutran esta experiencia y convide a otros a caminar.

EL LENGUAJE TECNOLÓGICO EN NUESTRO HACER


Las nuevas tecnologías, internet, Facebook, Ipod, Iphone, palabras como hardware, software, Posters twister, así como las exigencias de los consumidores, canales de distribución alternativos, la variada oferta de productos y servicios, han delineado crecientes exigencias a las empresas en el área de tecnología pero sobre todo a sus vendedores.

En la actualidad, se trata de vender, como por siglos se ha hecho, con la diferencia por un lado, que en estos tiempos y en el área tecnológica un producto de hoy ya no es lo mismo mañana y por el otro, el producto debe tener un “valor agregado” en la venta, que solo dará un profesional con competencias claves: saber escuchar, estar actualizado, empático, creativo, honesto, entre otros.

Pero la competencia fundamental requerida en un profesional es el interés en la especialización y el conocimiento profundo de su empresa, de sus procesos y sobre todo del producto o productos que lleva al mercado. La esencia radica en lograr concatenar un vendedor hábil y uno inteligente. Es lo mismo que preguntarse si uno hace ventas o hace clientes, y por ello podemos diferenciar a una persona que vende y un vendedor profesional, ya que el primero presta un servicio cada vez que vende, el segundo presta servicios a las personas que atiende. Hoy día, las empresas saben que la estrella del mercado ya no es ni el precio ni el producto, sino el consumidor y que la clave para llegar a su corazón es el servicio, el buen servicio.

Por tanto, es evidente el papel protagónico del vendedor, y de invertir y que el invierta en transformar su perfil; ser simpático y diligente ya no basta para lograr un cliente: los nuevos vendedores y sobre todo los que se encuentra en el área tecnológica, deben conocer en profundidad las características y beneficios del producto que ofrecen, de todo medio que interactué con ese producto y además deben desenvolverse con los clientes desde el más joven y actualizado, hasta con el mas adulto y lleno de dudas.

Entonces, ¿cuál es la mejor forma de entrenar nueva gente de en esta área? Muchos aseguran que lo indicado es presentarles el producto, la empresa y el cliente, para luego enviarlos a vender. Otros afirman que antes que nada hay que darles entrenamiento teórico adecuado para que, partiendo de allí, puedan comenzar a trabajar. Sin embargo, lo mejor parece ser, lograr un equilibrio entre teoría y entrenamiento práctico, pero esto realmente funcionará si se logra un cambio de actitud que los impulse a mantenerse actualizado.

Para cualquier persona no es fácil mantenerse actualizado con esta corriente tecnológica, empezando por la forma de comunicarse y debido a las conversaciones por e-mail o teléfono celular se ha creado una nueva jerga, que aunque muchos están en contra existe, y se conoce como el "e-lenguaje", el "qué" se cambia por "k"; "todos" por "to2"; "risa" por "lol", entre otras opciones. Como parte de esta nueva ola, también están los signos como :) o 8-) que resultan en expresiones visuales. Por otra parte surgen movimientos con el arribo de la Web 2.0, donde las páginas estáticas quedan atrás para dejar paso a sitios de colaboración, y donde el usuario es el personaje principal y el creador, o el Twitter, un híbrido entre mensajes cortos de texto, mensajería instantánea y ‘blogs que crea redes sociales de colaboración.

Recibir abrazos virtuales, besos virtuales, encontrar amistades o familiares que desde hace años no ves y hasta compartí una arepa de carne mechada es posible en el Facebook un espacio enmarcado en la nueva web social que te permite intercambias, fotos, videos, músicas y hasta amigos, tiene en la actualidad un promedio de 59 millones de usuarios activos, y hay quienes afirman que “Bueno o Malo, facebook a cambiado la manera de relacionarse en el mundo”.

Por otra parte, el poder diferenciar entre un IPOD y un IPHONE y estos a su vez de reproductores de Mp3 o Mp4, o quizás saber si en ellos puedo ver videos avi, mpeg, wna y si la capacidad de memoria es de 128 Mb, 256Mb o 1 Gb o si usan memoria SD o Micro SD o Mini SD, flash. Son muchos a lo que el sencillo acto de adquirir una cámara fotográfica digital se ha convertido en una experiencia realmente traumática, que si la marca, el modelo, los megapixeles 3, 5, 7 8.1, la resolución 320×200, 320×240, 512×384, 720×350, 800×600, 1024×768 , el zoom digital o analógico, el tipo de memoria stick, sd, msd, que la batería que usa AA, AAA, Lition y al final seleccionar entre 9 colores disponibles, y mucho más cuando al final el que conoce y da el visto a la compra no es el vendedor, ni el comprador, sino su hijo de 8 años que le acompañó.

Sería interesante reflexionar y tratar de dar respuestas a algunas preguntas; ¿podemos ser buenos vendedores de tecnología sino conocemos gran parte de estas cosas?, ¿podemos darle a nuestros clientes un servicio de calidad?, podemos darle un valor agregado al cliente sobre lo que compra?, es obligación del cliente estar actualizado sobre lo que busca y quiere? o es responsabilidad del vendedor entender el lenguaje tecnológico? Estamos orientando el mercadeo o la venta del producto al comprador real?

Lo que está claro es que los avances tecnológicos continúan y lo que hoy conocemos con propiedad, ya mañana no estamos seguro, es otra la historia; en nosotros está la posibilidad de asumir el compromiso personal y profesional de conocer y mantenerme actualizado en lo que hago, y en todo aquello que de una forma u otra interactúa con mi hacer.